recuerda que siempre vas a tener la opción de levantarte.

En eso se supone que consiste la vida, ¿no? En equivocarse, caerse y levantarse, pero sobre todo en levantarse. Por ahora estoy en la fase de... ni yo lo sé, pero bueno, espero no caerme y si me caigo, me levantaré como siempre; pero mientras me caigo o no, mientras me equivoco o no, mientras tanto, seguiré con mi día a día, es decir, queriéndote como nadie lo ha hecho.